sábado, 3 de abril de 2010

Little Red Riding Hood



Bajo la falda del vestido estallaron los dormidos
sueños que en la noche la mantenían viva.

Pobre Caperucita...












Quiero volar, lejos de aquí escapar. Dime, mi bien, quién me llorará si me dan alas y echo a volar. Quiero dormir, no quiero despertar, quiero ser la lluvia al otro lado del cristal, quizás alguien me espere en la oscuridad










Ahora cada noche el lobo la devora, clava sus dientes, y llora Caperucita mientras espera a que un aullido le diga que el dormido animal despertó.

Después descansa tranquilo el malvado lobo feroz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario